Invertir en una vivienda en el extranjero puede ser una buena decisión si se sabe que otros mercados inmobiliarios están en mejor situación que el español, sin embargo desconocer las especificaciones legales respecto del sector inmobiliario puede acarrear complicaciones innecesarias.
Muchas personas interesadas en comprar aún no se deciden porque prefieren esperar a que los precios bajen; muchos no pueden creer que los precios sigan subiendo aún más, justo cuando parece que es imposible que continúen a la alza. La esperanza de todos es entonces, que bajen, sin embargo los precios han bajado ya. Según los expertos quien desee vender debe hacerlo ahora, lo mismo que quien desee comprar.
Decantarse por la cada vez más popular idea de invertir en el extranjero puede ser un poco riesgoso, pues el desconocimiento de un mercado extranjero por barato que pueda ser implica esfuerzos de otro tipo. No obstante, invertir en países extranjeros que se conocen de primera mano puede ser una buena opción, sobre todo cuando una gran generación de españoles de entre los 30 y 40 años posee habilidades nuevas, como el dominio del inglés y sobre todo que ha viajado y estudiado por Europa. Muchos de estos cambios se han visto influenciados por intercambios interculturales como las becas Erasmus; las aerolíneas de bajo coste permiten a un gran número de españoles invertir en mercados inmobiliarios que se encuentran en una mejor situación que en España.
Conocer además del país y la situación del mercado inmobiliario, las normas de urbanismo, los costes fiscales, los terrenos edificables, etc., resulta fundamental para tomar la decisión correcta. Las empresas constructoras multinacionales que comienzan a invertir en el extranjero parecen tenerlo muy fácil, sin embargo, la situación de los particulares es diferente y muchísimo más riesgosa.
Resistir la crisis del mercado inmobiliario es una tarea difícil, sin embargo la solución no está en aventurarse en apuradas inversiones en le extranjero que pueden significar futuros problemas legales. Decidirse por una vivienda en España es costoso, sin embargo buscando de la mejor manera posible se puede encontrar un inmueble con un precio cómodo, o bien si se tiene suerte una vivienda subvencionada por el Estado.